TÉCNICA: TORSIÓN DE TEJIDOS

Para que las plantas se formen correctamente, una de las técnicas que se puede emplear es la torsión de tejidos. Consiste en dar horizontalidad a ramas verticales, generalmente chupones (brotes xilépticos).

La orientación de las ramas en las plantas, a menudo, dará como resultado o bien el crecimiento en busca de luz, (si la rama es vertical) o bien la producción de flores y fruta (si la rama está en posición horizontal)

Para evitar que las plantas se nos vayan en altura, entre otras cosas, se puede emplear esta técnica.

Se debe realizar en ramas verdes del año, aun no endurecidas o lignificadas. Hay que elegir bien el momento, ya que fuera de temporada la rama puede romperse. Suele practicarse desde principios de verano hasta que las ramas se endurecen.

En ocasiones es necesario realizarlo varias veces (en distintos momentos) en una rama para que tome la posición deseada.

Cómo se hace:

1: Tomar con ambas manos la rama. Sujetándola firmemente.

2: Mientras con una mano se mantiene la posición, con la otra se realiza un giro suave y lentamente pero con determinación.

3: Se debe notar al tacto un ligero chasquido o crujido de los tejidos. Parecerá como si hubiésemos roto la rama, pero no es así.